Hotel y Casona El Carmen Perlora, Perlora

El hotel tiene un gran ambiente familiar y una ubicación preciosa en colinas, además de ofrecer estacionamiento amplio. Las habitaciones son grandes y bien equipadas con vistas al campo, pero las paredes son muy delgadas, lo que hace que se escuchen ruidos molestos de las habitaciones vecinas. El personal es super amable y servicial, y el desayuno incluido es realmente bueno.

El hotel está ubicado en unas colinas preciosas, muy cerca del mar y de algunos espacios verdes ideales para observar aves, como los martinetes. Las habitaciones son amplias y cómodas, aunque tuvimos que cambiar de habitación debido a un olor a humo de cigarrillo. El servicio fue muy agradable y servicial. Sin embargo, la experiencia gastronómica podría mejorar ya que las opciones de desayuno eran limitadas. El precio fue razonable, pero la falta de ciertas comodidades, como un refrigerador en la habitación, fue un punto negativo.

El hotel tiene una ubicación fantástica, cerca del mar y rodeado de hermosos paisajes. Las habitaciones eran cómodas y cálidas, aunque con un leve olor a moho que obligó a abrir las ventanas. El personal fue muy amable y servicial. Sin embargo, el área de comedor puede mejorar, ya que esperábamos más opciones considerando los productos frescos disponibles en la región.

El hotel tiene una ubicación excelente, en las colinas y cerca del mar, con un hermoso entorno natural. Las habitaciones son amplias y bien equipadas, aunque las paredes son bastante delgadas, lo que puede resultar molesto por los ruidos de las habitaciones contiguas. El personal es muy amable y servicial, lo que siempre hace la diferencia. Sin embargo, el servicio en el restaurante podría mejorarse con más opciones de desayuno, ya que las que había no cumplían del todo con las expectativas.

El hotel tiene una ubicación excelente, en medio de un hermoso paisaje campestre. Las habitaciones ofrecen vistas encantadoras, aunque las paredes son muy delgadas y se puede oír a los vecinos. La atención del personal fue excepcionalmente amable y servicial desde nuestra llegada. Sin embargo, el ruido y la falta de insonorización hicieron que algunas noches fueran un poco incómodas.